Diferencias entre la transferencia térmica y la impresión térmica directa

La transferencia térmica y la impresión térmica directa no son lo mismo, hay diferencias importantes que deberías conocer para saber qué técnica se ajusta más a tus necesidades. ¡Descubre cuáles son!

Transferencia térmica y la impresión térmica directa: diferencias

Son muchas las diferencias entre la impresión por transferencia térmica y la impresión térmica directa. Claro que, si nunca antes probaste ninguno de estos tipos ni los comparaste, es normal que tengas dudas sobre cuál elegir.

Sin embargo, aunque en algunos casos pueden ofrecer resultados similares, hay diferencias importantes entre ambas técnicas. Son las siguientes:

En primer lugar, la impresión térmica directa aplica el calor desde el cabezal sobre la superficie de la etiqueta. Ésta hace que cambie de color debido a una reacción química al entrar en contacto con el calor.

Esto quiere decir que las impresiones son más sensibles a la luz y al calor.

Como resultado, se reduce la vida útil de la etiqueta o el material que se va a imprimir.

Por otro lado, tenemos la transferencia térmica. En este caso se utiliza una cinta de tinta (ribbon) que se calienta y con ella se puede imprimir en distintas superficies diferentes.

Este sistema tiene la ventaja de que permite impresiones de mayor calidad y más duraderas en este aspecto, porque el grabado no se quita.

¿En qué casos se usa la impresión térmica directa?

A mayores de las diferencias que te comentamos, debes saber que no siempre se utilizan para lo mismo. Por ejemplo, ésta la utilizan mucho las agencias de transporte para identificar paquetes.

Es decir, se usa en impresiones que no han de perdurar en el tiempo y que son un poco para usar y tirar. Digamos que para los casos en los que se utilizan son más que suficiente.

¿Y la transferencia térmica?

La transferencia del diseño se realiza en distintos materiales como poliéster, polipropileno, adhesivos y/o papel. De esta forma se asegura la máxima calidad y rendimiento, para dar como resultado un producto que puede durar muchos años.

Por ejemplo, tarjetas de identificación permanentes.

Pero además, pueden resistir bien las distintas condiciones climatológicas, por lo que se pueden usar en almacenamiento en frío o calor; lo cual es una ventaja.

Ahora que conoces las diferencias entre la transferencia térmica y la impresión térmica directa seguro que tienes más claro qué opción elegir en cuanto al proyecto que tengas en mente.

Recuerda que en Surjet podemos asesorarte y ayudarte para que elijas la opción más recomendable.